Hace casi un año nos enterábamos que uno de nuestros más amados héroes de la infancia se encontraba delicado de salud. En plena convención en Sudamérica, el también actor de doblaje Yamil Atala destaparía la noticia de que Jesús Barrero, otrora voz de personajes emblemáticos como Seiya de Pegaso, Rick Hunter, Koji Kabuto, Rex de Toy Story y de actores como Bruce Willis, Jim Carrey y Mark Hamill entre muchos otros se encontraba enfermo de la terrible enfermedad del Cáncer.
La noticia pegó fuerte en los fans quienes ya lo hacían atado a una cama de hospital sin embargo el mismo Jesús se encargaría de dar una entrevista asegurando que se encontraba bien, dentro de lo que cabe, y que a pesar de todo seguía luchando para salir adelante y que en términos directos no se encontraba grave o delicado aún. Se le llegó a ver en algunas convenciones alrededor de la república e incluso siguió prestando su voz para un par de producciones más pero sin dudas su condición ya no era la misma.
Finalmente el día de hoy nos enteramos de la desafortunada noticia de que nuestro querido Jesús había pasado a mejor vida.
Ha sido un golpe duro.
Para los fans de los Caballeros del Zodiaco en toda Latinoamérica y en sí del género de debe serlo pero personalmente hablando si me ha pegado algo fuerte. Estamos hablando de la voz que personificaba el heroísmo, la lucha por el amor y la justicia y la defensa del bien y de tus seres queridos. Muchos treintañeros (años más, años menos) identificamos su voz de inmediato. El no solo era la voz de algunos “Monitos” que veíamos casi a diario en la TV, él era la persona que nos mostraba, de diversas formas, lo que significaba ser un héroe.
Mi devoción por los actores de doblaje es grande. Mis más grandes ídolos (solo por debajo de mis propios padres) no son los Christopher Reeve o los Robert Downey Jr, no son los Christopher Nolan o los George Lucas, no son Batman ni Superman ni Alex Aguinaga ni Luis Hernández. Mis más grandes ídolos son los actores de doblaje porque son las personas que les daban vida a mis ídolos de la infancia. Gracias a ellos descubrí la diferencia entre el bien y el mal, descubrí que vale la pena pelear por las cosas importantes en la vida a pesar de los pesares y descubrí que la amistad es más que una simple palabra. De niño, como toda alma fácilmente influenciable, fui sometido a los más altos estándares de ética y moral (de nuevo, solo detrás de mis padres) viendo montones de caricaturas “infantiles” y “para niños” donde lo que importaba era pelear por el bien y por tus seres queridos.
Los recuerdos, las lecciones aprendidas y ese sentimiento de añoranza y nostalgia que permanecen en mi mente son con las voces de estas maravillosas personas. A diferencia de la gran mayoría yo siempre quise saber quiénes eran esos individuos que daban voz a mis más grandes héroes y al descubrirlo finalmente, ellos se convirtieron en mis héroes. ¿Qué creen que sentiría cuando me entero de que el prototipo de heroísmo en aquellas décadas de los 80s y 90s nos había dejado? Uno de mis más grandes ídolos a pasado al otro lado, siento como si en verdad hubiera perdido a alguien cercano a pesar de que nunca tuve la dicha de conocerlo en persona.
Es curioso como uno puede emitir juicios tan crueles sin tener la información correcta. Pocos años atrás, antes de que se destapara todo esto, los fans, yo incluido, criticábamos su trabajo en cierto relanzamiento de la serie preferida por todos. Se decía que ya habían pasado los años y que su talento había quedado muy atrás. Cuando me enteré de la cruda verdad me sentí terrible al entender el por qué de las cosas pero realmente agradezco mucho a Yamil Atala por decirlo porque cuando uno se entera de estas cosas, el golpe al final del camino es bastante más soportable que enterarse de repente.
Ahora tu cosmo se ha apagado pero estoy convencido de que te convertiste en estrella y que a partir de ahora nos estarás vigilando desde el firmamento y nosotros te recordaremos por tu gran calidad y por el mensaje de lucha y superación que nos dejaste.
Hasta siempre Caballero de Pegaso. Seguiremos tu lucha por el amor y la justicia, verás que no te decepcionaremos.